martes

¿Disponibles?

La verdad, cuando empiezo una relación o un romance, siempre me pasa lo mismo: siento que estoy demasiado disponible para el otro, mientras que el otro no lo está. Ayer conversaba con una amiga, bastante mayor que yo, ya divorciada y con nietos, que me comentaba más o menos lo mismo: que su nuevo romance siempre estaba ocupado y que ella siempre estaba disponible cuando él quería verlo, y realmente se sentía cabreada por la situación. A mí también me molesta a veces, más que el hecho de que el otro siempre esté ocupado, el hecho de que yo siempre esté disponible.

A ver, resulta que ahora tengo ochenta mil cosas que hacer en la vida: tengo mi trabajo, las clases (bueno ahora estamos de vacaciones), la maestría que me tiene a full, mil libros pendientes de leer, una casa que arreglar, mails por responder, aportes a diversos foros y a varias actividades en las que estoy metida, en fin... infinidad de cosas, pero pese a todo siempre estoy disponible, siempre que me quieren ver ahí estoy. ¿Será que realmente soy tan ordenada como para responder tan eficientemente a todo? Porque desocupada no soy y descuidada de mis actividades, tampoco.

El romance con PJ es lindo, de verdad me la estoy pasando bien, pero algo que no logro entender es por qué el señor es tan ocupado y tiene tan poco tiempo para verme, tiempo que, por cierto, tenía de sobra cuando aún no pasaba nada entre nosotros. La respuesta a la pregunta fue que antes de mí también tenía una vida. Sonamos. Yo también la tenía y la tengo y no dejo de tenerla porque él haya llegado y no dejaré de tenerla porque él se vaya, pero yo siempre tengo tiempo para él y el no tiene tiempo para mí. Ay, en fin. Yo sé que varios de ustedes estarán pensando que de verdad debo ser menos disponible, o sea, hasta inventarme actividades para que no piense que estoy siempre ahí, si tal vez deba hacerlo, pero eso implicaría dejar de vivir un momento esto tan bacán que estoy viviendo. No sé, de pronto me estoy haciendo líos por las puras, pero me he desahogado.

jueves

Olivia, la 'Lagrimitas'

Siempre me sucede: cada vez que quiero iniciar una conversación seria que implique abrir el corazón, me salen las lágrimas y termino perdiendo las batallas, cuando hay batallas que perder, o mostrando mi vulnerabilidad.

En fin, resulta que anoche tuve un sueño extraño con PJ, en el que llegaba a su casa y él no había dormido ahí y tenía muchas cosas de otra, en fin, el típico sueño abusurdo, donde el subconsciente se manifiesta estúpidamente (cuándo no). Bueno, hoy, cuando vino a desayunar, le conté mi sueño y comenzamos a hablar de todas esas manifestaciones subsconscientes y empezó a hacer preguntas como ¿quién te rompió el corazón para que no creas en nadie? o ¿siempre dejas que los celos se manifiesten así?, en fin, varias cosas y sucedió: me empezaron a salir las lágrimas como estúpida. Qué vergüenza, yo llorando en su hombro cuando solo se trataba de una conversación. Odio que suceda eso, sobre todo ahora que estoy en campaña de ser una mujer madura. o sea. Claro que todo terminó en muchos abrazos y en un: "Olivia, no te pongas así, somos muchos los que te queremos, tienen una familia maravillosa y unos amigos chéveres y a mí". Otro motivo para volver a llorar.

La cosa es que ya no puedo evitarlo, no puedo dejar de llorar y eso es algo que me molesta mucho, sobre todo porque necesito abrir el corazón y no puedo. En fin, claro que por otro lado debo aprender a aceptar que soy una lagrimitas y punto, ojalá PJ también lo entienda, de verdad.

lunes

Las nuevas aventuras de la vieja Olivia

Bueno, a lo de vieja me refiero por la edadcita... porque como bien sabemos apareció una nueva Olivia treintañera. En fin, justificado el título. Aunque la verdad siempre quise parafrasear a The new adventures of old Christine.

Bueno, ¿qué diré de todo este tiempo de silencio? Hay gente que piensa que estoy tan feliz que por eso no escribo. Sí y no. Empecemos por el no: estoy en una grave crisis de inspiración, trato de empezar a escribir cosas, lo que sea, y me quedo ahí, sin saber qué poner. Parece que las palabras se estuvieran escondiendo, suele suceder... pero es grave cuando las palabras son tu sustento y tu pasión. Supongo que la crisis pasará, como todo en la vida.

Ahora el sí. Bueno, ya no sigo 'flipando en colores', pero sigo contenta con la vida. Hay un nuevo romance, sobre el que no voy a abundar en detalles, que me está haciendo bien. No es un novio, no es un vacile, no es el príncipe soñado, tampoco superman, pero va bien. Quizá este tiempo de romance me ha hecho entender muchas cosas, a tomarme con calma los asuntos del corazón y a aprender a ir despacio (primera prueba de que no estoy enamorada, mejor), y sobre todo aprender que para cualquier cosa estoy primero yo. Eso, estoy contenta con todo esto. Es lindo tener noticias de alguien todos los días (aunque preferiría verlo más seguido), recibir de vez en cuando una sorpresa, ir más allá que el sexo... en fin. También me alegra saber que si esto se acaba hoy igual estoy contenta porque le he dado a mi vida justamente lo que necesitaba. No sigo, las energías suelen dispersarse.

Con el trabajo, como siempre bien. Aunque a veces, como en todo, surge esa extraña sensación de si valdrá la pena todo esto. Es decir, adoro lo que hago, pero cuando me toca ponerme a pelear por una coma o una mayúscula, pienso si no estaré desperdiciando mis energías o mi talento por cosas demasiado simples. En la U me pasa lo mismo, recién terminé un nuevo semestre y fue interesante. Pero también terminé con esa sensación de si habrá valido la pena el semestre, si habré dejado algo en mis alumnos, mucho más allá de la capacidad de diferenciar una tilde diacrítica o estructurar un párrafo. Me pregunto si algo de lo que hice en las clases contribuyó a sus vidas de verdad.

Eso, estos días he estado muy ansiosa, como todo el tiempo como si fuera mi última vez. De seguro es el estrés por las clases, por el periódico, la maestría, las cosas que no puedo manejar, el tiempo que se me escapa sin que pueda hacer mucho por aprovecharlo de la mejor manera. Eso.

Bueno, no hay más que decir, al final las nuevas aventuras de Olivia no son tan nuevas...

martes

Premio

Lilit me dejó un premio ayer. Averiguando averiguando, llegué a saber que estos premios, Arte y pico, surgieron como premios a blogs de artesanas, interesante, ¿no?, pero ya se han difundido tanto que ahora se otorgan a cualquiera (jajajaja, en buena onda lo de cualquiera, por supuesto). Bueno, la idea es premiar a 5 blogs que te parezcan muy buenos por contenidos y aspecto.

Aquí las reglas:

1. Debes elegir a 5 blogs que consideres sean merecedores de este premio por su creatividad, diseño, material interesante y aporte a la comunidad bloguera, sin importar su idioma.

2. Cada premio otorgado debe tener el nombre de su autor/autora y el enlace a su blog para que todos lo visiten.

3. Cada premiado, debe exhibir el premio y colocar el nombre y enlace al blog de la persona que lo ha premiado.

4. Premiado y premiador deben exhibir el enlace de Arte y pico, para que todos sepan el origen de este premio.

5. Exhibir estas reglas

A ver, aquí mis premiados:

Palabrazos: Me gusta mucho el blog de Ícaro y gracias a él siempre la siento muy cercana aunque esté un poquito lejos.

Apenas penas: No sé cómo llegué al blog de Carlos, pero es un gran poeta y no dejo nunca de leerlo.

El umor de mi vida: Tampoco sé cómo llegué al blog de Ambi. Tiene historias muy buenas, es muy fluida y creativa.

Crónicas de un Sith: No conozco a Darth Croxus y no sé quién se cruzó en el camino de quién, pero igual lo estoy leyendo bastante seguido.

De las palabras a los hechos: Este es un blog que me gusta mucho, lástima que esté tan calladito.

Y eso, no más. Asomaranse y gracias Lilit, no sé si hay cómo devolver los premios, pero igual eres de mis blogs favoritos, y lo de las vidas paralelas es taaaaaaaaaaaaaaaan cierto.